Lo quiero más que a nada.

Anuncia un coche, tan bueno que se haría cualquier cosa para poder conducirlo.

Es casi como una guerra entre la pareja, con muchas escenas de violencia. A cada uno le ocurren accidentes que ocurren que anteriormente han sido preparados por el otro. Y todo, para llegar antes al coche.

El anuncio juega con escenas muy exageradas acompañadas de una imagen bonita del coche y una buena música en la que dice: ‘I can’t see me loving nobody but you’.Traducido al español sería: ‘No me veo queriendo a nadie que no seas tú’, claramente refiriéndose al coche.

Buscando la felicidad.

Este anuncio, utiliza sobre todo, la ternura que nos produce ver un niño pequeño, guapo, gracioso.

El niño se encuentra rodeado de un paisaje paradisiaco que se estropea con la lluvia que simboliza que el chico ha mojado la cama ya que el pañal se ha calado.

El vídeo termina con una imagen de un niño angelical durmiendo profundamente por utilizar pañales Dodot.

Decisiones maduras.

En primer lugar, el anuncio destaca por la ternura y voz del niño, la cara de sufrimiento que pone, y por la sorpresa de que hable de un coche con tanta seriedad y preocupación.

Utiliza el humor, y hechos imposibles de que un niño compre un coche.

Termina con una ironía, de que el chico espera que su madre no se dé cuenta de que el Megane es suyo, pero supone que se dará cuenta ya que el coche tiene que estar catorce años aparcado delante de la puerta.

Juega con que la oferta es tan irresistible que hasta convence a un niño que ni siquiera lo puede utilizar.

Los pequeños placeres de la vida.

Este anuncio quiere vender una bebida alcohólica utilizando un actor muy conocido, como es George Clooney, para acercarse al público. También, utiliza la sensualidad ya que tanto éste como las otras dos personas son muy atractivas.

Además, llama la atención por un objeto de lujo, el barco.

El final es sorprendente porque con humor y exageración, George escoge el Martini antes que a la chica y el barco.

Las imágenes finales de la playa evocan sensaciones de tranquilidad y belleza.

Increible pero posible.

Este anuncio utiliza a un jugador español de baloncesto muy conocido, que hace algo impresionante, como es meter una canasta desde muy lejos, y de espaldas. Compara, lo poco que le cuesta a Ricky esto, con lo poco que cuesta una oferta especial que hay en el Mcdonalds.

Juega con la exageración, y con una cara conocida que consume los productos anunciados para que todos sigamos su ejemplo.

El tamaño no lo es todo.

Este anuncio empieza con una situación en la que uno se suele encontrar ridículo al estar en el cuarto de baño y no tener papel higiénico al alcance. Continúa con una imagen exagerada del papel higiénico y el niño empujándolo. Aparecen más objetos y productos de tamaño mucho más grande del real. Todo esto simboliza, que el producto que se vende, Fairy, tarda mucho en gastarse. El anuncio por tanto utiliza el humor y la exageración para destacar su producto.

Ellos también pueden.

Este anuncio quiere vender un detergente para lavadoras, buscando la igualdad entre sexos, para que los hombres también colaboren en las tareas domésticas.

En clave de humor, ridiculiza al hombre poniéndolo de torpe ante tareas fáciles que antiguamente solían hacer sólo las mujeres, como es, lavar la ropa. Exagera, ya que parece que algunos hombres no saben ni lo que es una lavadora. Con el baile del anuncio, y la letra de la canción hace que los hombres parezcan tontos.

Anuncia que ‘lavar con Punto Matic es tan fácil que hasta un hombre puede hacerlo’.

Juega con la asignación de papeles en la casa en la antigüedad. La mujer hacía las tareas del hogar, y el hombre, tenía el mando.

Convierte la tensión en pasión.

Este anuncio utiliza la sensualidad, porque aparecen dos personas atractivas jugando sensualmente en mitad de un ring de boxeo, y algo de erotismo, para vender colonias tanto para hombre, como para mujer.